miércoles, 24 de agosto de 2011

VII Vuelta nocturna al anillo verde ciclista de Madrid

El sábado 27 de agosto a las 22:30 partiremos desde la estación de Aluche para realizar el recorrido por el anillo verde ciclista de Madrid; en esta ocasión aún no se modificará el trazado para disfrutar también de Madrid río, pero en próximas ediciones lo tendrá en cuenta la organización.

1 comentario:

  1. Desde el sofá.
    Esa es la sensación que experimenté en esta edición de la vuelta nocturna al anillo a bordo de un Gekko fx de HP Velotecnic. El equipamiento que consideré imprescindible a la hora de encargarlo me ha dejado mas que satisfecho, ya que ni falta ni sobra nada.
    La experiencia fue mucho mas grata que en las ediciones anteriores, donde acudí con una bici "normal" y en esta ocasión solo los cuadriceps se resintieron un poco, por lo que pude disfrutar mucho mas de la sensación de libertad y velocidad que dan la posición reclinada, en la que se pasa de ver la rueda delantera de la bici a ver TODO lo que hay alrededor y al ir mucho mas cerca del suelo, los casi 50 Km/h que alcancé daban la sensación de mayor velocidad aún. Sin duda alguna, el equipamiento al que hacía alusión al principio contribuyó a que toda la experiencia fuera altamente gratificante: empezando por la iluminación (a cargo del conjunto de dinamo de buje Son y foco Edelux, donde incluso en los tramos mas oscuros alumbra a la perfección) y siguiendo por los pedales automáticos (con los que se puede pedalear tanto empujando como tirando de los pedales y además las piernas descansan mientras no se pedalea al quedar "colgadas"), los guardabarros (muy útiles para los charcos que incluso en verano nos encontramos en todo tipo de vías debido al riego de las zonas ajardinadas), los dos retrovisores Mirrycle (muy robustos y estables, que no vibran ni en las calles de adoquines), el cambio Dual Drive (que con sus multiplicaciones sustituye los tres platos habituales y con el que se evita que se salga la cadena en los múltiples cambios que hay que realizar durante el trayecto y que además permite cambiar incluso cuando el triciclo no está en movimiento), el portabultos (para colocar unas prácticas alforjas en las que llevar lo imprescindible: un kit de reparación de pinchazos, una cámara de repuesto, un pequeño botiquín, cámara de fotos, algo de comida, agua y ropa de abrigo como un cortavientos, una gorra...) o los banderines de gran visibilidad complementados con luces de baliza (si, lo se: no pasé desapercibido, pero prefiero eso a que me aplaste un autobús volviendo a casa). Y como decía, tampoco le falta nada, como podría ser la amortiguación, ya que el diseño del asiento es lo suficientemente cómodo y absorbe las vibraciones de tal manera que la diferencia de precio con el modelo superior no lo veo justificado para el uso que yo le voy a dar.
    Como de costumbre, la camaradería también reinó entre los mas de 300 participantes que nos dimos cita en esta ocasión; nos esperamos unos a otros para ir en grupitos, nos ayudamos en caso de pinchazo, compartimos viandas en los puntos habituales de descanso, y al llegar de nuevo a Aluche, después de los 65 kilómetros de rigor, el cansancio se disipó con la satisfacción de haber pasado una noche de sábado diferente, agradable y en buena compañía.
    Nos vemos en la próxima.

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